miércoles, 6 de julio de 2011

El hombre y sus barrotes invisibles

Jacob Maris - A Girl Feeding a Bird in a Cage






Mi querido Theo:

"(…) Existen aquellos que son holgazanes por pereza o dejadez de carácter, por bajeza de su natural; puedes, si quieres, tomarme por uno de ellos. Pero hay otro tipo de holgazán, el holgazán a pesar suyo, que vive interiormente corroído por un gran dese o de acción, y que si no hace nada es porque está imposibilitado para hacerlo, porque se encuentra como prisionero de algo, porque no tiene lo que  necesitaría para ser productivo, porque la fatalidad de las circunstancias lo ha reducido a este punto. Un holgazán de este tipo no siempre sabe lo que podría hacer, pero lo siente por instinto. En consecuencia, yo sirvo para algo, porque siento una razón de ser en mi interior; sé que podría ser un hombre por completo diferente. ¿En qué, pues, podría yo ser útil? ¿A qué podría servir? ¿Hay algo dentro de mi? Si es así, ¿qué es entonces?

Un pájaro enjaulado, en primavera, sabe muy bien que existe algo para lo que él serviría. Siente vivamente que algo que hacer, pero que no lo puede hacer,¿qué es? No lo recuerda bien; tiene una vaga idea, y dice:"Los otros pájaros hacen sus nidos, tienen hijos y crían la nidada".Y se golpea el cráneo contra los barrotes de la jaula.
 Pero la jaula sigue aquí y el pájaro enloquece de dolor.

"Vaya un holgazán",comenta un pájaro que pasa,"este debe ser una especie de rentista".Con todo, el prisionero vive, sin morirse; nada se trasluce fuera de lo que pasa en su interior, tiene un buen aspecto, y se alegra relativamente cuando nota un rayo de sol. Pero llega la época de la migración, y cae en la más negra melancolía."Pero si no le falta nada", dicen los niños que le cuidan en su jaula. El pájaro mira hacia el cielo, henchido, cargado de tempestad, y se rebela contra la fatalidad dentro de sí."Estoy preso, preso, y decir que no me hace falta nada, ¿y la libertad?¡¡Por favor, dejadme ser un pájaro cómo los otros!!"

Ese hombre holgazán se parece a este pájaro holgazán.

Los hombres se hayan a menudo en la imposibilidad de hacer nada, encerrados en no sé qué jaula horrible, horrible, horrible...

No sabría decir qué es lo que nos encierra, nos bloquea, parece sepultarnos, pero sentimos la presencia de barrotes invisibles, de rejas, de muros.

¿Sabes lo que hace desaparecer esa prisión? Pues el amor y la amistad .Estar entre amigos, entre hermanos, amar: esa es la fuerza soberana que, cómo hechizo mágico, abre de par en par las puertas. Quien no la posee, permanece en la prisión hasta la muerte (…)"

Tuyo, Vincent.

Julio 1880

2 comentarios:

Lady Gemixxxxxxxxxxx dijo...

Sin palabras... Hoy las jaulas de la Bicho, esas que tanto me hablan también, tienen distintos barrotes... Gracias a la familia Gogh por colorear incluso lo invisible...

Y gracias a ti, princesa de La Plata, por hacer desaparecer SIEMPRE las cárceles del alma.

Te quiero. Mucho. Muaaaaaaaaaa!

jotaVe dijo...

Mi Lady! qué vida despintada sin la locura de nuestro amigo Vincent...

Sin la Bicho qué mundo tan mudo!

Gracias por darte una vuelta, siempre, por esta covacha!

Te quiero.