Thomas Shipp and Abram Smith, 7 de agosto de 1930 |
El fotógrafo Lawrence Beitler tomó una fotografía de los cuerpos sin vida colgados de un árbol. Alrededor: la muchedumbre que aprueba y señala. Cuentan que se vendieron miles de copias; diez días y diez noches se la pasó imprimiendo… cincuenta centavos cada una."(Tiempo de terror, citado en Leyendas de América)
Abel Meeropol (Lewis Allan) un poeta judío y comunista que volvió sus ojos sobre este “detalle” del paisaje norteamericano fotografiado una noche de agosto, en Alabama.
Billie Holiday, la Dama del Blues transformando en melodía tanto horror.
Leo por allí:
“Esta canción consigue que la gente que está en orden se separe de los cretinos y los idiotas” Billie Holiday.
El resto es arte y memoria.
Southern trees bear strange fruit,
Blood on the leaves and blood at the root,
Black bodies swinging in the southern breeze,
Strange fruit hanging from the poplar trees
Pastoral scene of the gallant south,
The bulging eyes and the twisted mouth,
Scent of magnolias, sweet and fresh,
Then the sudden smell of burning flesh
Here is fruit for the crows to pluck,
For the rain to gather, for the wind to suck,
For the sun to rot, for the trees to drop,
Here is a strange and bitter cry
Blood on the leaves and blood at the root,
Black bodies swinging in the southern breeze,
Strange fruit hanging from the poplar trees
Pastoral scene of the gallant south,
The bulging eyes and the twisted mouth,
Scent of magnolias, sweet and fresh,
Then the sudden smell of burning flesh
Here is fruit for the crows to pluck,
For the rain to gather, for the wind to suck,
For the sun to rot, for the trees to drop,
Here is a strange and bitter cry
Árboles sureños cargan extraño fruto,
Sangre en las hojas, y sangre en la raíz,
Cuerpos negros se balancean en la brisa sureña
Extraño fruto pende de los álamos.
Pastoral escena del sur galante,
ojos saltones y boca retorcida,
Perfume de magnolias, dulce y fresco,
entonces el repentino olor de carne quemada.
Aquí está el fruto para que arranquen los cuervos,
Para que la lluvia recoja, para que el viento chupe,
Para que el sol descomponga, para que los árboles dejen caer,
Esta es una extraña y amarga cosecha.
Sangre en las hojas, y sangre en la raíz,
Cuerpos negros se balancean en la brisa sureña
Extraño fruto pende de los álamos.
Pastoral escena del sur galante,
ojos saltones y boca retorcida,
Perfume de magnolias, dulce y fresco,
entonces el repentino olor de carne quemada.
Aquí está el fruto para que arranquen los cuervos,
Para que la lluvia recoja, para que el viento chupe,
Para que el sol descomponga, para que los árboles dejen caer,
Esta es una extraña y amarga cosecha.
1 comentario:
¿Apatía ante el horror? Me pregunto cuantos "detalles" nos pasan desapercibidos cada día, o ante cuantos apartamos deliberadamente la vista...
Siempre en lucha, a veces desde los abismos...
Besos Jota. Sigamos dando vueltas de tuerca, que nada detenga las conciencias.
Te quiero,
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