sábado, 23 de diciembre de 2017

Verano en la tormenta



Pronostican un verano tormentoso (mire desde el ángulo que mire),  de esos en los que la quietud de los frutos se estrella contra el suelo al paso brutal del granizo.  De esos en los que la energía eléctrica se evapora y no queda nada para hacer más que contabilizar rayos a través del ventanal. Uno, dos… cien.  Pero entre rayo y rayo, aparece una luciérnaga - intermitente también – con su panza de led apoyada sobre el vidrio,  recordándome que la luz es propia.
Mi vida es esta tosca contradicción: la frase “siempre puede ser peor” bordada en  un pañuelo con las puntas anudadas y que huele a jazmines.
Cruzo los dedos. A seguir. 

3 comentarios:

Jorge Curinao dijo...

¡Qué lindura!

jotaVe dijo...

;) Veremos cómo se porta este verano!


Mua!

Jorge Curinao dijo...

Pues celebro que hayas vuelto. ¡Mua!